A la hora de capturar imágenes de infrarrojos, disponer de un enfoque preciso significa mucho más que obtener una imagen nítida. Puede suponer la diferencia entre detectar o pasar por alto un problema. Si la imagen no está bien enfocada, la medida de la temperatura no será fiable. Es posible que todo parezca correcto, cuando en realidad está a punto de sufrir un problema grave. Resulta muy importante capturar imágenes térmicas enfocadas, ya que no se puede ajustar el enfoque posteriormente durante la edición de estas.
Durante la evaluación de una cámara de infrarrojos, preste especial atención al tipo de sistema de enfoque del que dispone y asegúrese de que se adapta a sus aplicaciones y nivel de experiencia. A continuación se indican los sistemas de enfoque más comunes:
- Enfoque fijo: las cámaras de enfoque fijo (de apuntar y disparar) tienden a disponer de una resolución relativamente baja y se utilizan para objetivos situados a aproximadamente 45 cm en adelante. Puede utilizar este tipo de enfoque para aplicaciones de resolución de problemas a corta distancia, como para la comprobación de fugas en conductos del aire, rodamientos sobrecalentados o para la identificación de conexiones sueltas o corroídas.
- Enfoque manual: mediante una cámara de enfoque manual puede enfocar de manera precisa objetivos situados a partir de 15 cm y capturar imágenes nítidas y obtener resultados más precisos a una mayor distancia. Si es usted un técnico de termografía más experimentado, es posible que prefiera utilizar una opción manual para poder enfocar cada imagen de un modo más preciso, aunque tarde más tiempo que si utiliza el enfoque automático.
- Enfoque automático: es posible que escoger una cámara con enfoque automático le permita ahorrar tiempo, pero en función del tipo de enfoque automático, es posible que todavía tenga que realizar ajustes manuales. Con frecuencia se encuentran varios objetivos en un campo de visión, con lo que es posible que algunos sistemas de enfoque automático escojan un objetivo diferente al que usted desea. En tal caso, puede cambiar al modo de enfoque manual y ajustar el enfoque de manera precisa para capturar el objetivo deseado.
- Enfoque automático asistido mediante láser: la adición de un medidor láser de distancia al sistema de enfoque automático le permite centrarse en el sujeto en el que está interesado. El medidor de distancia calcula la distancia real hasta el objetivo y la muestra en la pantalla para que el motor de enfoque pueda ajustar este de manera precisa para obtener la imagen más nítida.
- Captura de imágenes multifocal: algunas cámaras capturan y almacenan varias imágenes del objetivo desde distintas distancias focales y las combinan automáticamente en una imagen nítida mediante el uso de algoritmos especiales. De este modo se obtienen objetivos enfocados situados cerca y lejos en una imagen.